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Origen e historia del ajuar funerario

13 abril 2022

¿Sabes qué es un ajuar funerario? Es como se llama en arqueología y antropología a los objetos que se entierran junto a los fallecidos en su tumba. Esta práctica la han realizado a lo largo de la historia diferentes civilizaciones del mundo. En Pompas Fúnebres de Arosa queremos contarte el origen y la historia de esta tradición.

Qué es un ajuar funerario

En general, surgieron por la creencia de la vida después de la muerte. Por eso, en la mayoría de las ocasiones se trata de bienes personales y provisiones para ayudarles en el camino. 

En general, los objetos de los ajuares funerarios que han aguantado hasta nuestros días son objetos como cerámicas o utensilios de piedra y metal. Sin embargo, existen pruebas de que también se depositaron diferentes objetos orgánicos.

Evolución de los ajuares

Se cree que esta práctica se realizaba, al menos, desde la época del Paleolítico Medio. De hecho, diferentes arqueólogos han encontrado ajuares que consistían en colmillos perforados, cuentas de valvas marinas o tallas líticas que tenían ocre rojo alrededor de los huesos. Todos estos restos están datados en el Paleolítico Superior.

Por ejemplo, en las cuevas de Crimaldi (Italia), se encontró un gorro similar a un bonete cubierto de 3.000 conchas. En Cavillón (Francia) se descubrió un esqueleto cubierto de conchas y dientes de animales, así como cuchillos y otros utensilio.

Si bien la práctica empezó en el Paleolítico, fue en el Neolítico y en la Edad de Bronce cuando comenzó a ser más común. En esa época se colocaban en las tumbas vasos de incienso, utensilios, dagas o collares. Todo ello dentro de recipientes de cerámica de diferentes formas y tamaños.

Los ajuares funerarios en el antiguo Egipto

Pero si hay ajuares funerarios conocidos y reconocidos a nivel mundial son los del Antiguo Egipto. Son, además, algunos de los que se encuentran mejor conservados. El pensamiento de la época estaba muy en sintonía con la idea de que la vida del Más Allá era similar a la de este mundo. Por eso, se creía que los bienes que depositaban en las tumbas se podrían utilizar en la vida futura.

Por otro lado, en los enterramientos pintaban imágenes que recogían al vida terrenal del fallecido, así como sus trabajos y momentos con la familia. Se llega, incluso, a incluir unas estatuillas llamadas ushebti, que eran de sirvientes para ayudarles en su futura vida.

Sin embargo, aquellas tumbas en los que había ajuares funerarios fueron saqueadas en la mayoría de los casos. Uno de los mejor conservados de la época egipcia es el ajuar de Tutankamón, pues fue descubierta antes de que la saquearan. De hecho, para evitarlo, los etruscos ponían la palabra śuθina en todas las piezas de sus ajuares. Esto significaba “de una tumba” y la intención era desalentar su reutilización en caso de ser robadas.

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